Nacho Cattaneo: "Revolver es mi casa, es mi familia"

Ícono del skateboarding argentino y amante de la moda, la fotografía, la cocina y el arte. Desde Surf & Rock Media visitamos a Nacho en su local ubicado en Malabia 1150 y charlamos de sus comienzos en el skate, sus sueños, sus pasiones, Revolver y mucho más. 

1) ¿Cómo fueron tus comienzos con el skate? 

Arranqué en el 95 o 96  cuando viajé a Punta del Este, Uruguay de vacaciones con un amigo y mi viejo y conocimos a Lucho Knabe. Ahí estaba Lucho en el bowl de la Plaza, un lugar que era muy emblemático y que ahora no está más. En ese momento Luciano estaba vendiendo una tabla, se la compramos con mi amigo (nos peleamos para ver quién se la compraba) y ahí empezamos. Volvimos a Buenos Aires, nosotros teníamos muy buena onda con un vendedor de Cristóbal Colón, y compramos los skates. Nos juntábamos en Plaza Charcas donde estuvimos como tres años tratando de aprender a hacer el Ollie, antes no había videos, no había nada, de hecho no sabíamos ni lo que era un Ollie. Un día paso un pibe, nos dijo “esto es un Ollie” y nos cambió la vida.

2 ) ¿De quién te inspirabas cuando arrancaste?

Y, no había redes sociales en ese momento, no había nada. Creo que el team de Vans con Mariano Gonzalez, Eze Falcón, por las gráficas de Cristobal Colón sabíamos de ellos y también estaba la Gossip y la Buenos Muchachos. Cada tanto nos llegaba algo de eso, pero fueron tres años en los que no sabíamos los nombres de los trucos.

3) ¿Soñabas con aparecer en alguno de esos medios gráficos?

No, cero. Me encantaba que había gente que tenía sponsors y que podía vivir de eso o viajar. Eso me encantaba. 

4) ¿Pensabas al Skate como algo a lo que te querías dedicar el resto de tu vida?

Si, me di cuenta que me quería dedicar bastante y que me gustaba mucho, pero siempre, con todo, hice cosas paralelas, como que nunca me dediqué 100% al skate. Sacaba fotos, trabajaba en la facu, siempre hacía cositas, pero por inquieto, no porque pensaba que no iba a llegar, eso era lo de menos. 

5) Sos diseñador gráfico, ¿llegaste a ejercer?

Hoy en Revolver lo re hago, pero antes estuve en una agencia y también trabajé en Vulk como diseñador gráfico. Luego empecé con Momish y ahí también, tenía un montón de parte gráfica, contacto con artistas, diseñadores y luego arranqué con Revolver. Lo hice con uno de mis mejores amigos.

6) Pasa mucho que en su mayoría, los emprendedores comienzan a hacer la ropa que quizás no pueden encontrar en otros lugares.

Exacto. En ese momento no había camisas escocesas, tipo leñadoras copadas y si había, esto en el 2009, había en ferias. Entonces dijimos: “¿Y si arrancamos una linea de camisas escocesas?, de una!”, esto sin venir del palo, nada. Ahí compramos una tela, un amigo del viejo de mi amigo hacía camisas, no se porque, y camisas es muy difícil, no es una remera. Arrancamos con eso y lo vendimos al toque. Vendíamos todo por Facebook o teléfono, te llamaban, te daban el talle y listo, la venías a buscar a mi casa, que ni siquiera te podía abrir porque la tenía explotada de rollos o cosas, era medio un desastre. Entonces bajaba, se la probaba en la entrada y listo. 

7) ¿Cómo se te despertó ese gusto por la moda?

La ropa va muy de la mano del skate. El skater consume mucha ropa, esta muy atento a la tendencia, no de la moda, sino de lo que se usa. A mi siempre me gustó la ropa, siempre. De hecho, siempre me gustó vestirme. Me acuerdo que nos íbamos de vacaciones a Pinamar y yo salía a la noche muy vestido, pero porque siempre me gustó lookearme.

8 ) ¿Pensabas llegar a donde estas hoy con Revolver cuando arrancaste?

No, ni loco. Tampoco hoy llegamos a conquistar el mundo pero nunca me lo imaginé. Si veo que llegamos a donde llegamos por una consecuencia de un montón de laburo, no es que llegamos de casualidad. Me rompí y me rompo el orto, podía pasar como no. Por suerte se generó una comunidad de aceptación por la marca. Todo con mucho trabajo pero se logró. Creo que estamos alcanzando lo que yo siempre quise que es tener una marca donde se nota que hay alguien detrás. 

9) Algo que se nota claramente es que tanto en las colecciones como en el local existe una correlación. Todo vive de manera muy armoniosa.

Nosotros antes estábamos en un showroom, luego pasamos a nuestro primer local en Palermo, un lugar que nos cambió la vida porque antes en el showroom, que estaba bueno, nos pasaba que la gente tenía que venir, tocar el timbre, habríamos tres veces a la semana cinco horas por día, era difícil, había que atenderlo, no teníamos tanta ropa. Cuando nos pasamos a ese primer local nos cambió todo, porque la gente pudo tener acceso a la marca de lunes a sábado de 11 a 20hs, ese era el horario. Ahí, con esa apertura, empecé a ver un poco más la ropa en la calle. Cuando se nos venció el contrato ahí nos tuvimos que ir y llegamos a este nuevo lugar, en Malabia 1150, casi esquina Córdoba. Cuando nos instalamos acá yo ya quería poner la cafetería y no la puse porque no me animé, por plata, por un montón de cosas al mismo tiempo. Pasar de un showroom a un local era mucho y bueno dije, vamos de  poco. Y cuando nos mudamos acá quise poner la cafetería desde el principio porque si no lo hacía iba a pasar lo mismo que pasó allá. La parte de adelante iba a ser una oficina y bueno, lo cedí para para abrir el café.

10) Se nota una unión perfecta entre lo que haces con Revolver y lo que pasa en RVR Café, desde los artistas y diseñadores con los que colaboras hasta los cocineros que intervienen la cafetería los fines de semana

Exacto. Todo esta pensado con el mismo equipo. Revolver soy yo, Daniela Breccia y Tamara Espeleta y RVR es un equipo aparte en el que colaboro yo. La cafetería es de Anita Tolomei, mi ex novia. Ella tiene una forma de pensar muy parecida a la mia, congeniamos muy bien y siempre tratamos de que haya un mismo lenguaje de comunicación, un mismo tipo de fotografía. Cada vez tratamos de poner más en práctica eso y que se entienda que RVR y Revolver son lo mismo. Hay mucha gente que viene por RVR y conoce Revolver y hay muchos que vienen por Revolver y se encuentran con RVR. 

11) ¿En qué te inspirás a la hora de diseñar las prendas? ¿Seguís a diseñadores de afuera?

Sigo a todos los diseñadores, estoy al tanto de lo que hacen las marcas pero me inspiro más en lo vintage. De ahí sale todo. Después tenemos un equipo de diseño que soy yo, Daniela y Tamara y con ellas me siento al principio de la colección, vemos qué vamos a hacer, en que nos inspiramos. Hoy el equipo de Revolver esta compuesto por Daniela Breccia, Tamara Espeleta y yo. Además, Anita Tolomei que es una parte muy importante de la marca. Pero entre los tres pensamos y diseñamos todo. Tamara está más en la producción y talleres, Dani más en diseño pero entre los tres armamos todo. El camino creativo se define con una dedicación muy grande a pensar en qué es lo que queremos hacer para la nueva colección, por dónde queremos ir, qué paleta de colores queremos utilizar, cuál va a ser la moldería, qué cosas funcionaron de la colección anterior y que no. Después vemos que se consigue en el país. Cada vez entran menos cosas y, si bien a nivel textil tenemos una buena producción local, un buen algodón, las telas que usamos nosotros cada vez se consiguen menos. 

12) Cuando miras al local y ves lo que lograste con Revolver, ¿Cuánto de todo lo que fuiste aprendiendo en el camino, el skate, la fotografía, el diseño, ves plasmado acá?

Todo. En un punto las colecciones me llevan a cuando yo empecé a andar en skate y justo la etapa que estamos viviendo ahora tiene mucho que ver con ese momento en el que arranqué arriba de la tabla. Estoy usando la ropa que yo usaba cuando era chico entonces por suerte se me esta haciendo fácil porque lo viví. No me lo tiene que contar nadie. 

13) ¿Qué es Revolver para vos? 

Revolver es mi casa, es mi familia. Es como un hijo, un proyecto al que le tengo mucho amor y espero nunca perderlo.

Fuente: Instagram (@roparevolver)

Entrevistas Sábado 22/05/2021